Giant Tortoise Fossils
While not visible on the surface, fossils of Late Pleistocene Giant Tortoises (50,000 to 47,000 years old) have been documented in this area. Some fossil remains are housed at the Vertebrate Paleontology Museum at UT Austin.
Pleistocene megafauna is the agreed term that refers to large animals with adult body weight of over 45 kilograms or 100 pounds, that lived on North and South America, Australia, and Europe during the Pleistocene epoch (1.8 million to 12,000 years ago). Most became extinct in a geologic instant 14,800 to 13,700 years ago, near the end of the last glaciation.
As recently as 14,000 years ago, millions of “mega mammals” such as mammoth, mastodon, Stag-moose, glyptodonts, giant bison, giant horse, camels, saber tooth cats, American lion, and giant sloths were widespread across North America.
In south Texas, evidence from the Pleistocene megafauna is mostly fragmentary and comes in the form of accidental finds of mammoth, giant bison and giant gopher tortoises remains.
Mammoth remains, mostly molars, fragments of large bones and parts of tusks have been found in surface deposits in western Hidalgo and Starr counties and south of the Rio Grande. Most striking was a portion of a femur caught on the nets of a shrimp boat in 20 meters of water and 30 miles offshore. This find demonstrates that mammoth and possibly other Pleistocene Megafauna live on the now submerged continental shelf.
Evidence of giant bison in the Rio Grande Valley comes in the form of a molar and multiple small fragments of bones found on a ranch north of Edinburg. Giant bison was the largest and heaviest bovid ever to live in North America.
An extraordinary fossil site, discovered in 1986 during construction of the Raymondville Drainage Canal, contains a large concentration of Giant Gopher Tortoises. Eleven complete tortoise shells, multiple vertebrae, fragments of mandibles, and cranium remains were recovered 2 to 3 meters below the surface in an extensive floodplain deposit of the ancestral Rio Grande. Especially remarkable was the discovery of a nest containing whole and fragmented eggs of a breeding population of tortoises. Research on this rare site concluded this thriving community of giant tortoises was buried approximately 50,000 years ago by a flash flood of the river. Casts of the fossils with their beautiful hexagonally patterned shells may be seen at the Museum of South Texas History.
Listen to the podcast in English - Pleistocene Megafauna and Giant Gopher Tortoises
El término «megafauna del Pleistoceno» es la designación convencional de los animales de gran tamaño y con un peso corporal adulto superior a los 45 kilogramos que habitaron en Norte y Sudamérica, Australia y Europa durante la época geológica del Pleistoceno (entre hace 1,8 millones y 12 000 años). La mayor parte de estos animales se extinguió hacia el final de la última glaciación en lo que es un simple instante en términos geológicos: entre hace 14 800 y 13 700 años. No hace más de 14 000 años que campaban por el continente norteamericano millones de «megamamíferos» como mamuts, mastodontes, gliptodontes, bisontes, alces y caballos gigantes, camellos, tigres dientes de sable, leones americanos y perezosos colosales.
En el Sur de Texas, las pruebas de la presencia de la megafauna del Pleistoceno son en su mayoría de naturaleza fragmentaria, proviniendo de hallazgos accidentales de restos de mamut, bisonte gigante y tortugas terrestres gigantes. Los restos de mamut, sobre todo molares, fragmentos de huesos de mayor tamaño y de colmillos, se hallaron en depósitos superficiales en la zona occidental del condado de Hidalgo y en el condado de Starr, así como en el lado sur del Río Grande. Destaca el fragmento de fémur que quedó atrapado en las redes de un barco camaronero a 20 metros de profundidad y a unos 50 kilómetros de la costa. Esto demuestra que el mamut y posiblemente otras especies pertenecientes a la megafauna del pleistoceno habitaron en zonas de la plataforma continental actualmente sumergidas.
El hallazgo de un molar y de varios pequeños fragmentos de hueso en un rancho al norte de la ciudad de Edinburg atestigua la presencia en El Valle del Río Grande del bisonte gigante, el mayor y más pesado bóvido que jamás haya habitado Norteamérica
Un yacimiento de fósiles extraordinario, descubierto en 1986 durante la construcción del canal de desagüe de la localidad de Raymondville, contiene una gran concentración de tortugas terrestres gigantes, habiéndose excavado once caparazones completos de tortuga, diversas vértebras, fragmentos de mandíbula y restos del cráneo, entre dos y tres metros de profundidad bajo la superficie de un amplio depósito aluvial correspondiente al Río Grande ancestral. Resulta destacable el descubrimiento de un nido que contenía fragmentos y huevos enteros de tortuga. Las investigaciones realizadas en este excepcional yacimiento concluyeron que esta vibrante comunidad de tortugas terrestres quedó sepultada hace unos 50 000 años durante una inundación relámpago. Es posible contemplar los hermosos patrones hexagonales de los caparazones en los moldes que se muestran en el Museo de Historia del Sur de Texas.
Escucha en Español – la megafauna del Pleistoceno y de las tortugas terrestres gigantes